Las muestras de agua recogidas en la desembocadura del río Moche, en la provincia de Trujillo, donde aparecieron peces muertos, serán enviadas hoy a la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) para que determine la eventual presencia de sustancias contaminantes en el afluente.
En la víspera, el biólogo Jorge Izquierdo, de la Dirección Regional de Salud Ambiental de La Libertad, y personal de la Defensoría del Pueblo llegaron a la zona para constatar la denuncia hecha por pescadores.
“Si hay muerte de peces es porque algo está pasando y es lo que las investigaciones van a determinar”, dijo Izquierdo tras recoger las muestras y realizar exámenes de campo que determinarán la presencia de descargas industriales o metales tóxicos. Las investigaciones tardarán unos 20 días. La muerte de las especies marinas fue advertida el lunes por pescadores, quienes aseguraron que el fenómeno comenzó hace tres o cuatro días. Fue el pescador Abel Abanto Carranza (41) quien notó un espesor de aproximadamente 30 centímetros de peces muertos -entre lisas, tilapias y otras- al borde de gran parte del río tras ser alertado días antes por su hijo.
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